Los vinos tintos del Alentejo dominan dentro de la región, con la única excepción de la DOC de Vidigueira, dedicada por entero a la elaboración de vinos blancos. Revisando las cepas mayoritarias, nos encontramos dentro de las blancas los Arinto, Galego, Perrum, Manteúdo, Roupeiro y Rabo d’Ovelha. Entre las tintas, nombres importantes como los de...
Los vinos tintos del Alentejo dominan dentro de la región, con la única excepción de la DOC de Vidigueira, dedicada por entero a la elaboración de vinos blancos. Revisando las cepas mayoritarias, nos encontramos dentro de las blancas los Arinto, Galego, Perrum, Manteúdo, Roupeiro y Rabo d’Ovelha. Entre las tintas, nombres importantes como los de Alfrocheiro, Moreto, Aragonez, Periquita, Trincadeira y Trinca Grossa.
El Alentejo es un área de producción vinícola de Portugal dividida oficialmente en 5 denominaciones de origen, las de Portalegre, Borba, Redondo, Reguengos y Vidigueira, generando, todas ellas, vinos con VQPRD. Los estatutos de estas cinco regiones establecen que los vinos con derecho a utilizar la DOC deben presentar las cepas fijadas en, al menos, un 80%.
En Alentejo las crianzas mínimas habituales son de 12 meses, antes del paso de los caldos a las botellas.
Color cereza con reflejos morados, abundante lágrima, capa media. En nariz destacan los tostados de la barrica nueva, café, toffe y fruta roja del bosque (zarzamora y fresas salvajes). Al agitar nos damos cuenta de que estamos ante un vino complejo, franco en nariz, vainilla, fruta pasificada, minerales y recuerdos especiados.